domingo, 17 de enero de 2016

MADRE DIVINA - LA CERTEZA MÁS ALLÁ DE LAS CERTEZAS... A CERTEZA PARA ALÉM DAS CERTEZAS...


MADRE DIVINA
LA CERTEZA MÁS ALLÁ DE LAS CERTEZAS
25.12.14


Desde el Rincón Cristalino de la Paz, mi Manto se extiende, envolviendo a cada uno de vosotros, hijos e hijas, bien amados de mi Corazón.

Cuando vuestras certezas son sostenidas en su propio corazón, las zonas de miedo, de inseguridad, vienen a la superficie, revelándose como una sensación, a veces, de incerteza y soledad.

Ustedes viven, como les fue anunciado, exactamente este momento de conmoción, de reestructuración, de sacudida de todo aquello que acabó por transformarse en VERDADES PRESUMIDAS, tomadas como ciertas e infalibles, pero no por la claridad y la vivencia en el descubrimiento de VUESTRO CORAZÓN, pero si por la fuerza de la inercia y del hábito que lleva vuestros esquemas y conceptos, vuestros apoyos racionales y visiones del mundo, a volverse castillos de arena, con apariencia de fortaleza de roca.

Yo les invito, amorosamente, como vuestra MADRE DIVINA, a que se acerquen a mí, a un momento de PAZ.

Cuando el mundo a vuestro alrededor; cualquiera que sea el teatro de las formas físicas o psíquicas; parece estarse desmoronando en pedazos, y la incerteza asola vuestro horizonte, yo les recuerdo, hijos benditos: EN MÍ ENCONTRARÁN LA FUERZA Y LA SERENIDAD.

La Paz y la Gracia de mi Manto que se encuentra a vuestra disposición, les permite en este momento de Paz, aceptar y acoger la revelación de estas zonas de miedo e inseguridad que restan, todavía, como partes que constituyen vuestro aspecto psicológico.

No hay razón, ni necesidad para encogerse en temor, delante de estas sombras.

Bien amados Hijos de la Luz, éstas sombras no se muestran para atormentarles o hacerles tambalear. Al contrario, estas zonas sombrías de vuestro mundo psíquico -individual o colectivo- se muestran para que vuestra Luz se devele en mayor intensidad, porque no es en un campo de batalla y de confronto, en lo que se debe transformar vuestro interior, pero si, en un templo de acogimiento y sanación, de transmutación y alquimia.

Tales zonas de sombra, no deben ser temidas o rechazadas por ustedes, al contrario, delante de ellas, observen y reconozcan vuestra Esencia Luminosa y la infinita potencia de vuestro Amor.
Es la puerta que debes atravesar, es la porción de vosotros mismos que debes acoger, sanar y reintegrar, lo que resultará en un reconocimiento más pleno, más amplio de vosotros mismos, lo que resultará en una visión más clara y en un caminar más firme y pacífico.

Yo me encuentro a vuestro lado, como Madre, amiga, y guía. Mis brazos les sustentan, y mi luz, en vuestra luz, suavemente, y a través de muchos medios, les conducen al reconocimiento de nuestra UNIDAD.

Yo Soy el Padre y la Madre, el Silencio y la Voz, la Acción y el Reposo.

Yo Soy aquello, ustedes son aquello.

Recuerden, Ángeles de la Gloria, recuerden vuestra ilimitada capacidad de transformar e ir más allá. Vuestra ilimitada sabiduría, más allá del movimiento, de Ser, ni inmóvil y realizar en el movimiento.

Benditas y Sagradas Llamas de mi Corazón Ardiente, ni siquiera todas las palabras de los Tres Reinos del Tiempo, podrán ser cuerpo suficiente para expresar el Poder de mi Amor en Vosotros, de mi cuidado y compasión, que les acoje a cada instante.

Venid mis hijos, descansen en la certeza, más allá de la certeza, más allá de las pruebas, de las confirmaciones, del sentido y de los conceptos.

Venid, reposen en mi seno, en mi abrazo amoroso, reposen en el pulsar que no miente y que les impulsa a la Inmortalidad, a lo Atemporal, a lo ilocalizable.

Venid amados, y sepan de vuestro propio centro y misterio inaudito, indecible, de nuestra Unión y de vuestra Esencia Eterna.

En este canto de transcendencia, yo les saludo en Amor.


Mensaje Canalizada por Selén,
Transcrição feita por colaboradores da ELV.
Mensagem canalizada por Selén
http://www.escolaluzviva.com.br

  

 MÃE DIVINA
A CERTEZA PARA ALÉM DAS CERTEZAS
25.12.14

Desde o Canto Cristalino da Paz, meu Manto se estende, envolvendo cada um de vós, filhos e filhas bem amados de meu Coração.

Quando  vossas  certezas  são  abaladas  em  seu  próprio âmago,  as  zonas  de  medo,  de insegurança  vem  a  tona,  se  revelando  como  uma  sensação,  por  vezes,  de  incerteza  e solidão.

Vocês vivem, como lhes foi anunciado, exatamente este momento de abalo, de reestruturação, de sacudida de tudo aquilo que acabou por se transformar em verdades presumidas,  tomadas  como  certas  e  infalíveis,  mas  não  pela  clareza  e  vivência  na redescoberta de vosso coração, mas sim pela força de inércia e do hábito que leva vossos esquemas e conceitos, vossos apoios racionais e visões de mundo a se tornarem castelos de areia com aparência de fortalezas de rocha.

Eu  vos  convido  amorosamente,  como  vossa  Mãe  Divina,  a  se  achegarem  a  mim,  a  um momento de Paz.

Quando o mundo ao vosso redor, quer seja o teatro das formas físicas ou psíquicas, parece estar  ruindo  e  se  tornando  em  pedaços  e  a  incerteza  assola  vosso  horizonte,  eu  vos relembro, crianças benditas: em Mim encontrareis a força e a serenidade.

A Paz e a Graça de meu Manto que se acha à vossa disposição lhes permite, neste momento de Paz, aceitar e acolher a revelação destas zonas de medo e insegurança que restam ainda como partes constituintes de vosso aspecto psicológico.

Não há razão nem necessidade para se encolher em temor diante destas sombras.

Bem amadas crianças da Luz, estas sombras não se mostram para vos atormentar ou vos fazer fraquejar. Ao contrário, estas zonas sombrias de vosso mundo psíquico - individual ou coletivo - se mostram para que vossa Luz se desvele em maior intensidade, pois não é um campo de batalha e de confronto no que deve se tornar vosso interior, mas num templo de acolhimento e cura, de transmutação e alquimia.
Tais zonas de sombra não devem ser temidas ou rejeitadas por vós, ao contrário, diante delas vede e reconhecei vossa Essência luminosa e a infinita potência de vosso Amor.
É a porta  que  deveis  atravessar,  é  a  porção  de  vós  mesmos  que  deveis  acolher,  curar  e reintegrar, o que resultará num reconhecimento mais pleno, mais amplo de vós mesmos, o que resultará numa visão mais clara e num caminhar mais firme e pacífico.
Eu me acho ao vosso lado. Como Mãe, amiga e guia, meus braços vos sustentam e minha radiância  em  vossa  radiância  suavemente  e  por  muitos  meios  vos  conduz  ao reconhecimento de nossa Unidade. 

Eu sou o Pai e a Mãe, o Silêncio e a Voz, a Ação e o Repouso.
Eu sou Aquilo, vós sois Aquilo. Relembrai anjos da Glória, relembrai vossa ilimitada capacidade de transformar e ir além, vossa  ilimitada  sabedoria,  para  além  do  movimento, de  Ser  ni  imóvel  e  realizar  no movimento.

Benditas e sagradas chamas de meu Coração ardente, nem todas as palavras dos três reinos do Tempo poderiam ser corpo suficiente para expressar o poder de meu Amor em vós, de meu cuidado e compaixão que vos embala a cada instante.

Vinde minhas crianças, descansai na certeza para além da certeza, para além das provas, das confirmações, do sentido e dos conceitos. Vinde, repousai em meu seio, em meu abraço amoroso, repousai no pulsar que não mente e que vos incita à imortalidade, ao atemporal, ao ilocalizável.  Vinde amados e sabei de vosso próprio centro o Mistério inaudito, indizível de nossa União e de vossa Essência Eterna.

Neste Canto de transcendência, vos saúdo em Amor. 



Mensagem canalizada por Selén www.escolaluzviva.com.br
Transcrição feita por colaboradores da ELV.
Mensagem canalizada por Selén
http://www.escolaluzviva.com.br

No hay comentarios:

Publicar un comentario